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Con un total de 17 hectáreas de extensión, este parque confiere a Nou Barris un agradable aspecto de modernidad que se integra perfectamente en la zona residencial donde se ubica. El terreno está adaptado y su perfil ondulante esconde multitud de pequeñas sorpresas.
Un farol con forma de peineta. Y un poco más allá, un manantial de agua gigante. El Parc Central de Nou Barris de Barcelona parece querer hacerle la competencia (eso sí, a pequeña escala), a su homólogo neoyorkino. O como mínimo, pretende elevarse como uno de los símbolos de esta zona de Barcelona. Inaugurado en 1999 y ampliado en el 2003, se trata del segundo parque más extenso de la ciudad, y aprovecha el verde de sus explanadas para integrar edificios singulares e históricos del barrio, como el antiguo Instituto Mental de la Santa Creu, sede actual del Ayuntamiento del Distrito, la antigua masía de Can Carreras, o el Forum Nord, un centro que acoge iniciativas empresariales de carácter innovador.
El agua es el elemento que aglutina este tejido de edificios y zonas verdes. Se encuentra, apacible, en estanques triangulares diseminados por todo el Parque Central, pero también brotando con fuerza de altísimos manantiales que refrescan la zona. Una parte del antiguo acueducto del Baix Vallès es otro de los elementos arquitectónicos que dibujan el perfil de esta zona verde. Un perfil completado por la singularidad de sus farolas, en forma de diapasones las más altas y de palmas los menos elevadas. A parte de dar luz, estas curisoas estructuras de madera ofrecen sombra y cobijo en el Parque Central de Nou Barris.
El imperdible familiar:
Los niños y niñas se sentirán dentro de un libro de Jules Verne en la zona de juegos. Diseñada como si fueran elementos marítimos, cuenta con dos ballenas gigantes, un barco, una aleta móvil y mucho más en las que trepar, deslizarse y saltar. Y muy cerca, hay una zona de escalada, hamacas de cuerdas y toboganes gigantes.